A medida en la que (literalmente) vas viviendo tu casa, es inevitable que el desorden aparezca. Y por vivir tu casa me refiero a usar cada ambiente en su más amplio significado, usarlos de verdad.

Años atrás, en la casa de mis papis, teníamos un hall de estar en el segundo piso, algo parecido a un “family room” por lo que no había necesidad de colorear, jugar o ver tele en la sala, la sala era para los adultos. Había un jardín así que no había necesidad de correr en los pasillos, y teníamos un comedor de diario así que el comedor principal era para ocasiones especiales.

Hoy, mi mesa de comedor es también mi mesa de trabajo (tengo una oficina pero desde acá no sólo tengo vista a mi hija si no que al parque también, y eso se agradece), mi sala principal es la sala de juego, la sala de estar, la sala de televisión y el área de juegos (a veces también es el comedor). En mi oficina hay de todo un poco entre cosas mías, de Valentina, de mi esposo y ahora de Seasons of Love y la cocina, por como van conociendo a mi familia, es sin duda el corazón de todo lo anterior.

No es que quiera detallar mi dinámica familiar pero el asunto es que sí pues, cuando se vive un espacio -y no sólo cuando tienes niños, los adultos también lo hacen-, empiezas a acumular cosas, a dejarlas fuera de lugar y poco a poco todo se vuelve un loco.

Desde el counter de mi baño con todas mis cremas y maquillaje, hasta los condimentos en la cocina y las Crayolas de Valentina, todo, tiene que tener su lugar. He dicho. O al menos eso quiero.

Lo bueno es que con el tiempo, nosotros bien chancones (o como resultado de nuestro propio desorden/orden) y queriendo tener las cosas lo más bonitas al ojo posible (que tu visión del mundo cambia cuando te empiezas a rodear de cosas bonitas para ti), empezamos con algunas técnicas para mantener el orden de nuestras vidas, perdón, de nuestras casas y hace poco encontré una nota en Houzz (no se lo cuentes a nadie pero esta página me entretiene tanto como mi Vogue) que daba las mil y un técnicas que me encantaron, y estas fueron mis favoritas:

1) Arriba, para cuando tenga mi casa propia: Eso de tener unas paredes pizarra me parece buenazo, por un lado, estas sirven para indicar qué hay en cada puerta (orden que puedes modificar con tan solo una mota y una tiza) como para darle a los chicos un espacio definido de juego. ¿Ah, qué te sientes creativa y quieres pintar pequeña hija mía? Pues bien, pinta acá y solo acá, deja mis paredes en paz

2) No se si alguna vez llegue a ese nivel de pulcritud, pero si como yo, no eres la más trome en la cocina y te cuesta diferenciar el romero del huacatay (ay no me digas que nunca te ha pasado) es mejor tener todo señalizado. Usar tapers para organizar las cosas y meternos dentro de un cajón (para no tenerlos a la vista) me parece un golazo. Quiero.

3) Hablando de cocina, nosotros implementamos en una pared una repisa y le pusimos frascos de vidrio no solo para organizar mejor, si no para mantener lo más fresco posible menestras, quinoa, arroz, fideos, sales, etc…Claro, si le pusiera esas etiquetas sí que me pasaría de audaz, aún no llego a eso pero por lo pronto, puedo diferenciar las cosas y ver rapidamente qué hay y qué se está acabando para hacer mi lista de compras lo más efectiva posible (aunque hoy vi que, no sé por qué, tengo en la cocina tres paquetes de arveja partida que comeremos por las próximas tres semanas, esas cosas pasan, ¿no?)

4) Hablando de tener las cosas visibles, mira, al final, cuando tienes las cosas organizadas, hasta se ven como parte de la decoración, doble check. Otra cosa, y esto lo quiero hacer en mi baño pero no encuentro las canastas adecuadas: organiza todos los frascos pequeños, esos que rondan la mesa como alma en pena y ponlos, juntos, en un solo sitio, como esta canasta de metal. Verás que todo se ve ahora más ordenado aún.

5.- ¿Tienes espacio disponible arriba de tus gabinetes y están más ocupados que 20? ¡Ajá! Esto te gustará: Canastas (o tapers grandes, latas, o contenedores, lo que quieras) para utilizar ese espacio disponible al máximo, y que no se vea todo hecho un caos.

6.- ¿Más para la cocina? Pon una repisa donde puedas, ganar ese espacio de forma vertical, hacia el techo, te libera de mucho espacio a lo ancho. Esto debo hacerlo ya ya ya en el cuarto de Valentina porque cada día llega con un trabajo nuevo del nido que empiezan a dar vueltas por todos lados y deben de estar bien organizados, al menos por ahora.

7.- Y es que hablando de cosas para niños, estas dos ideas me fascinan. La primera, es que mira tu que tienes una oficina en casa o en tu chamba….¿tienes un espacio vacío entre tu escritorio y las gavetas? ¿será cierto eso? (que el espíritu de Cristina salga de este cuerpo decadente ya por Diosssss)…¡pues aplique usted una repisa! Una repisa justo al medio, en esos 30cms de pared que estaban vacios, y mira todo lo que puedes hacer con ellos. Yea baby.

8.- Ahora, además de la repisa, mira que debajo de ellas puedes instalar algo de donde colgar sus obras de arte, tus recortes de revista, anotaciones, etc….

9.- Tienes ese sillón rodeado de todo el desorden del Perú? ¿Juguetes de tus hijos? ¿Zapatos regados? ¿Revistas sin un lugar dónde guardar? No desespereis amada mía que, unas canastas debajo (o tapers gigantes) te ayudarán a esconder algunas cosillas con las que no quieres lidiar (la historia de mi vida). Ojo, canastas o tapers procura que sean todos iguales (si vas a poner más de dos), ya que esto ayudará a que se vea todo más ordenado aún.10.- ¿Papeles regados por todos lados? Desde el menú de la semana a la dieta que te dio el nutricionista y la nota que te mandó la profe del cole, el calendario del mes o lo que encontraste en el bolsillo del pantalón de tu esposo antes de meterlo a la lavadora, todo, con puede ir en un corcho, como para verlo, no perderlo y cada quince días o algo así, deshacerte de lo que no sirve y reciclar.

Muchas de estas cosas ya las tengo en marcha y otras sin duda las pondré ya ya ya a la orden. Pero cuéntame tu, qué te parecieron y cuales son tus trucos para tener las cosas (al menos a simple vista) bien ordenadas.