Dios, mi marido y ustedes también saben que lo de las carteras no se me da mucho. No que me encanten que me fascine y que tenga varias en mi poder pero pasa que, soy demasiado práctica, olvidadiza y floja, tengo que reconocerlo, para cambiar de carteras todos los días según lo que me ponga o al lugar al que vaya.

Soy, desde hace varios años ya, fanática de la cartera todocombina y contodomelapongo haciendo que, sinceramente, mi compra de carteras haya sido mínima (te juro que no son más de cinco) en los últimos….5 años??? Así que luego de caer en la cuenta que estoy en una cartera-emergencia, me puse a analizar cuáles son las tendencias -y es que hay que comprar con inteligencia-, qué se usa y sobre todo, qué no se usa, para guardarlas con amor en un cajón y sacarlas de nuevo en algún momento.

¿Qué se usa? Las carteras con estructura, de formas geométricas, es decir, cuadradas, rectangulares, con cuerpo y con forma. El slouchy bag o la cartera estilo Hobo (esas con forma como de media luna que cuelgan de hombro) digamos que pasan a un segundo plano dándole todo el protagonismo a las carteras más estructuradas. Para que me entiendas, esta es la que pondremos por ahora en stand by:

Dentro de esta gran tendencia que carteras bien formadas de la que posiblemente podemos responsabilizar a Celine por popularizar de tal manera la cartera que ves arriba en la primera foto pero sin repasamos la historia veremos que la Birkin y la Kelly Bag -todas de Hermès…ooooh carteras con historia, tema para próximo post- son las pioneras y que la speedy de Louis Vuitton no pierde vigencia porque se trata de eso, de carteras “armadas” por decirlo de alguna forma y finalmente, de que todo vuelve.

Pero me puse investigar y verás, a raíz de la Celine que te mostré, Phillip Lim sacó su propia versión:

Y luego Louboutin hizo de las suyas, sacando su propia interpretación que mira, hace énfasis en los laterales de las carteras que salen de forma prominente.

Que luego la modificó Reed Krakoff y anote usted esto otro que son las carteras blanco y negro, de moda de moda de moda.

Y hasta Jimmy Choo sacó esta (no la más bonita pero para que veas que todos se suman a lo que está de moda, todos)

Luego encontré esta Fendi, de cuero con un print diagonal que me jaló el ojo para darme cuenta de que Burberry también lo puso en práctica, pero eso te lo muestro después.

De las grandes muy Celine, pasamos a carteras mini, pequeñas y con asa larga o asa corta, de tela o de cuero, lisa o con textura, con cierre o con hebilla al frente y en el mejor de los casos, con todas las combinaciones posibles, y es que hay para elegir.

Abajo Dolce & Gabbana.

Lulú, la última creación hiper mini de YSL.

McQueen, Miu Miu y Jimmy Choo, todos caen con sus minis.

Pero hay más, y las certaras toman formas alargadas pero siempre bien duritas, abajo Sophie Hulme y Proenza Schouler.

Otra tendencia dentro de las minis y estructuradas son las metalizas.

Y luego vino Burberry, que tomó la forma alargada de una cartera y la hizo medio ovalada pero sin perder la estructura. Las pintó, las imprimió digitalmente y hasta telares que parecen peruanos vimos por ahí.

Prada se decantó por el estilo de cartera Bowling que también vi en el Pre-Fall de Burberry.

Y ahora sí, para muestra varios botones, una recopilación de varias fotos bien inspiradoras para que veas bien a qué me refiero y si tienes pensando hacerte de una cartera nueva, sepas bien por dónde empezar:

Fotos de: Net-a-Porter, StreetFsn y CarolinesMode.