Hace poco tuve un pandero con las mamis del colegio de mi Vale (sí, un pandero, es de mis primeros panderos en la vida!), algo que hemos instaurado con la finalidad de conocernos entre nosotras, conocer un poco más de nuestras familias, de dónde venimos, quiénes somos, todo un mundo por descubrir porque estas son familias con las que vamos a convivir por 11 años como mínimo y mi Vale me pide a veces invitar o ir de invitada a la casa de sus amiguitos a almorzar por ejemplo, así que antes de irnos con permisos hemos preferido tener estas reus mensuales entre las mamis para que entre algo rico de comer (y beber ) nos vayamos conociendo más, y me parece un hit.

Somos un grupo lindo donde hay de todo, y eso lo hace suuuper rico. Hay desde mamás que trabajan como maestras, las independientes, las gerentes de gerentes de importantísimas empresas, y las bloggers también, esa soy yo, ja!

La cosa es que el otro día llega a uno de los panderos Mili, una de ellas, que siempre me da la impresión de estar on top of The world (cuando sea grande quiero ser como ella!), que trabaja en el mundo corporativo por excelencia con un look versión 2017 de los que yo usaba allá en el 2001. La vi, y saz, de lo más profundo de mi eterna amnesia me vi a mi misma, ¡yo me vestía así, qué paja!

Me reía sola y en eso empecé a recordar ese guardarropa riguroso lleno de blusas, faldas, vestidos hermosos que me compraba con cuello ojal, cintura marcada y corte en A, medias panty y tacones altísimos.

Oh sí, recordé lo mucho que me enamoré de la moda en esos tiempos, aprendí que si bien era súper chiquilla, no tendría más de 21 ó 22 años, quería y debía vestirme como alguien un poco más grande (claro que hoy veo mis fotos y era obvio que mi cara de bebé me delataba!). Todos eran mayores que yo y muy, pero muy elegantes. Así que me obsesioné con lo mejor de Melrose Place (por mi madre qué vintage mi referencia!) y empecé a armar un clóset del que aún tengo algunas cosas, claro, talla 0 así que nada me queda pero bueno, la cosa es que luego de ver a Mili me pregunté, si yo siguiera trabajando en ese mundo, ¿cómo me vestiría hoy?.

Lo que me lleva a la siguiente pregunta, en especial para las chicas que trabajan en oficina, qué looks son los que más usan? Es full básicos o buscan algo de tendencia?

Yo armé este con cosas que tengo en mi clóset y para ponerle algo de tendencia amarré un pañuelito al cuello, algo que te permite jugar dependiendo de si usas uno de dos colores o más, con estampado geométrico o de estilo cowboy, hay muchas opciones y este es un truco que queda lindo lindo con un color de labios que lo acompañe. ¿Qué les parece?

Camisa Gap, pañuelo vintage, falda El Closet de mi hermana, cartera Prüne, zapatos MariaFernanda.