Acá sumo un proyecto más para poner en práctica en mi casa, y como ante la necesidad hace que me ponga siempre a investigar, en el post de decoración de hoy les hablo de aparadores para el comedor.

Ocurre que en mi cocina me falta espacio, por lo que hace un tiempo me puse a reorganizarlo todo y me pregunté por ejemplo, cómo hace mi mami y mi abuela que no es que tengan taaaaantos muebles en la cocina pero sí que tienen muchísimas vajillas, estilo de vasos, copas, manteles y bueno, cosas que me imagino vamos acumulando con el tiempo.

¿Dónde las guardan? Porque no las escucho hablar de falta de espacio, no. Así que me puse a hacer un recorrido mental de sus comedores y claro, caí en la cuenta de que ambas, mi mami y mi abue tienen una vitrina y un súper buen aparador, donde guardan de todo, desde nuestros recuerditos de las primeras comuniones de los hijos y nietos, hasta la vajilla más fina.

Miro de vuelta mi casa y es exactamente eso lo que falta, ¡un aparador!. Mi comedor es un comedor típico marrón oscuro de Saga Falabella que mi esposo oso compró hace tiempazo -sin mi-. Es marrón con las sillas forradas de cuero negro y mirando a mi alrededor caigo en la cuenta de que tengo muchos muebles marrones oscuros, desde el bar, el organizar de la tele, las mesitas de café de la sala y oh sí, mi comedor también.

Como te imaginarás, ando pensando desde hace semanas en pintarlo todo, o forrarlo de tapiz, o pegarles espejo, o qué se yo, pero ando en una crisis anti marrón de aquellas que espero solucionar pronto. Mientras tanto, ando tratando de ordenar mis ideas porque señora, quiero un aparador para completar mi comedor.

Lo que me llevó a buscar y buscar información. Las tendencias de decoración hablan de integrar elementos de distintos estilos y aplicarlos -de forma inteligente- a un sólo ambiente. Los muebles de madera pintada en tonos oscuros oscuros se complementan con el vidrio y los detalles metálicos. Otros muebles van forrados en espejo que también son tendencia así como pintarlos con toques de azul.

Lo elegante siempre viene de moda y lo “natural” que va desde el bambú, la madera sin mayor retoque y los tonos crudos gritan un regreso a la naturaleza que taaaaanto pide la humanidad hoy en día.

Con las tendencias más o menos claras, pasé a mi a una de mis mayores interrogantes en esta búsqueda por mis aparador perfecto. Necesito saber si es que este debe de combinar o no con el resto de mi comedor. Me respondí inmediatamente yo solita diciendo que no way, un mueble marrón más en mi casa, otra raya más al tigre y salgo disparada de aquí, así que no, no pienso buscar un mueble marrón de estilo líneal y minimalista, como mi mesa y sillas.

Y ojo que por eso, no voy a perder ni una gota de elegancia. Mira este comedor súper chic, la mesa es de líneas oscuras y el aparador va más con el color de las sillas y paredes. Eso sí, hay un trabajo muy geométrico acá, si no mira el diseño de la sillas, así que ese concepto se repite en las puertas del aparador formado por medias lunas (como en los respaldares) y círculos.

Así que sí, mi aparador puede tener vida propia y me inclino por esa idea. Te contaba que los muebles forrados en espejo están full, especialmente cuando el mueble tiene líneas clásicas, como este, que es simplemente UNA BELLEZA. Ojo al piojo, mira las paredes con molduras, más elegantes y clásicas no existe, tal como el mueble, pero mira el minimalismo -salvo por ese cuerno- de las lámparas súper híper lineales. Es la mezcla de esos dos elementos la clave del éxito de este ambiente taaaaaaan hermoso.

Un poco menos formal, este aparador lleva el vidrio de fondo y se combina con el diseño en madera al duco, muchísima personalidad también.

Sin querer queriendo, siempre termino adorando las propuestas de estilo Shabby Chic. No es que en realidad las ponga en práctica pero al final del día, siempre tengo una marcada inclinación por reparar, cambiar y modificar muebles viejos. Por ejemplo, me encanta eso de cambiar algunas puertas por vidrio y alternarlas con la cajonería de madera. El acabo “lavado y avejentado” me encaaaaanta pero debo ser sensata con migo misma y creo que será para mi próximo hogar, meter algo así por ahora a mi casa se vería muy raro…bueno, no en mi dormitorio pero sí en la sala-comedor.

Mira por ejemplo el trabajo que le hicieron a este mueble de madera clásico clásico pero bien clásico, de esos que encuentras por montones en las tiendas de antigüedades.

Y mira cómo quedó así, ¡me encanta!

O este otro que tiene todo el estilo de mueble francés de época -como los muebles del dormitorio de Valentina-, que han pintado mitad de duco y la otra como forrado en un papel metálico. No es mi favorito, no, pero es una idea.

Otra idea que no tiene que ver mucho con el tema pero me pareció buenaza, es la usar el espacio sobre el aparador para colocar vasos y copas, así maximizamos nuestros lugar más pequeño (atenta a ese espejo en forma de Flor/Sol….lo veo por todos lados, mira la segunda foto de este post).

Ahora sí, volviendo al tema, si hay que encontré es que mucha gente usa el aparador en un tono que va desde el verde oliva hasta el verde más celeste, todos ellos se adaptan súper bien a comedores de distintos estilos, como este combinado con una mesa de comedor en madera natural y mira que el espejo sobre el aparador es de lo más rococó pero va regio con los tiradores de éste.

Menos verde y más celeste, igual acá con una madera natural y espejo dizque enchapado en oro.

Acá, con una mesa oscura y sillas de forradas con telas de distintos estilos colores, bellas (hasta que Valentina pise una de ellas, o limpie sus manitas de pollo a la brasa, lo veo, lo veo venir).

Súper ecléctico, acá también.

¿Conclusiones? Muchas:

• El aparador no tiene que combinar con la mesa.
• El estilo de este puede variar de lo más clásico a lo más modernista, de lo shabby chic a lo minimalista.
• Los colores también varian desde el negro (primera foto) al celeste pastel.
• Los accesorios como tiradores, espejos y adornos que les coloquen juegan un papel fundamental para crear ese estilo que quieres lograr.
• Si tu aparador está en un ambiente integrado, por ejemplo con la sala, debe guardar el mismo lenguaje que ella.

¿Qué te parece? Lo que más me gusta de esto es que son formas no muy caras de darles un nuevo respiro a nuestras casas, como que les damos un nuevo look sin gastar más de lo necesario, todo está en una manito de pintura