Hoy cumplo 35 años y tu cumples 6 meses y con todo lo que me gusta mi cumple, hoy sólo quiero celebrarte a ti.

Quiero celebrar tus ojos grandes, tus dos dientes, tus 69 centimetros con 8.358 kilos y el nuevo peinado que estrenas, el peinado de papá. Quiero celebrar que te sientas solita, que me miras y sonríes, que soy tu mundo y a mi aún me falta cuerpo para entregarme al tuyo. Quiero darte más.

Celebro que eres mi cosita linda, que duermes como langostino, que te ríes como pulgoso y te duermes en mi pecho.

Hoy mi amor, quiero agradecerte por enseñarme algo que jamás pensé ni entendí ni me imaginé, que es tenerte acá, que es el amor interminable, incansable e inagotable que siento por ti.

Hoy tan solo mirarte me dieron ganas de llorar, todas las ganas de llorar y mientras pienso que te quiero escribir tengo un nudo en la garganta y a la vez, mis dedos no paran de teclear. Me has cambiado la vida, me has cambiado la cara, me has cambiado el pelo, el cuerpo, el alma, me has cambiado toda y eso me hace tan feliz como que me asusta, porque no soy ninguna de las mujeres que fui.

Fui hija pero ahora soy mamá. Fui divertida, fui jueguera, fui bailarina, fui la mujer que llora, fui grupie, enamorada, querida y loca. Fui esa mujer que rie despreocupa y escandalosa y que se deprime y que sufre y que corre al psicologo para tan solo encontrarse ahora en los ojos de papá y en tu vida. Tu vida es mi vida. Prestada, lo se, pero soy tu vida entera hija y tu eres la mía de comienzo al fin. Fui todas las mujeres que fui y ahora soy tu mamá. Desde que me despierto hasta que me acuesto, aunque me acueste sabiendo que seguro, pronto me vuelvo a despertar.

Eres mi bendición, mi sueño jamás soñado porque nunca, ni dormida ni despierta me creí capaz de sentir algo así.

No eres facil. No me dejas tiempo de ser yo pero yo soy tu. No soy quien fui, soy una nueva versión de mi y esa versión la construyes tu, segundo a segundo estoy hecha para ti. Hay días en los que si a penas puedo postear, en los que me doy por servida si respondo la mitad de mis correos y consigo organizar la semana. Llegar a una reunión con los labios pintados es un logro no muy frecuente porque lo absorbes todo, mi cuerpo, mi energía, mi mente y mi corazón. Eres la dueña de todo. Pero no me canso de ti. Cuando creo, siento y estoy segura de que no puedo con mi alma, consigo pararme y dar un paso más, porque lo doy por ti. Para ti.

Tengo la sensibilidad a flor de piel, tengo que celebrar que hace 6 meses llegaste a mi vida. Que eres mi persona favorita, mi lugar favorito, mi hobby y mi trabajo, mi sueño y mi cansancio, lo eres todo Valentina. Y eres aún más.

He entendido que soy tu alimento, tu lugar seguro, tu calma y tu tranquilidad y eso me abruma y me alegra, me asusta. Quiero estar a tu altura, ser la madre que te mereces y hacerte feliz.

Hoy es nuestro día mi gorda bella. Hoy por fin, 35 años después, estás aquí.