Mi Spa Day en Amarige

Escrito por: Vanessa
amarige

Mi embarazo fue bastante pero bastante bueno, nada de malestares ni nauseas ni nada, mi único pesar era que todos los días, a eso de las 5.30 de la tarde me empezaba un dolor en la espalda baja que mira, ni la hora del té inglesa fue nunca tan puntual y me acostumbré a que todos los días mi horario de existencia caduque a esa hora, porque solo me quedaba acostarme y vivir mi dolor con mucho orgullo en la cama. Creo que fue esa una de las razones por las que dejé de salir a eventos sociales y cosas, a penas acudí a algunos desfiles del LifWeek y cocktails sumamente necesarios porque te juro que no podía estar de pie, ni sentada, ni en tacos, ni en chatos, la espalda me mataba así que juré que un día alguien me iba a masajear de pies a cabeza cuando el embarazo termine.

Pero vino la lactancia. Mi bendecida y abundante producción de leche me volvió a cortar la viada porque el tamaño de mis teteras era inmanejable y la constante necesidad de extraerme leche me hacía vivir pendiente de mi hija o del aparato eléctrico (disculpen el detalle pero así era la cosa). Estas acostada boca arriba era incomodo (la ley de la gravedad), boca abajo me aplastaba, de costado era un fastidio…asi que imposible considerar un día maravilloso de masajes que para ese momento, ya se había escalado a un día completo de Spa.

Quería, porque me lo merecía y creo que en algún momento (o varios) de nuestras vidas todos nos lo merecemos, un día pleno de engreimientos, donde me masajeen, me exfolien, me inviten champagne en un jacuzzi, me traten como a una reina y me relajen todo lo que mi imaginación y cuerpo decidan. Así que para navidad, mi esposo maravilloso se fue a Amarige y me regaló mi Day Spa (no, la letra de la tarjeta no es suya para las que iban a comentar).

Yo, no podía más de la emoción, un día maravilloso de Spa era mi sueño e hacía casi casi dos años y finalmente lo iba a tener. Cuando pregunté los detalles, él me dijo (feliz de la vida) que se trataban de 5 horas dedicadas a a mi, al relajo, que me iban a hacer de todo incluyendo un baño en leche de cabra y una mascarilla de caviar y no se qué cosas más. El hablaba pero mi mente se detuvo en las cinco horas.

¡¡¡5 horas!!!! Pero si en la pelu con las justas aguanto la hora exacta que dura el retoque de canas!!!! Cada vez que me ofrecen el reacondicionamiento me niego a morir porque media hora más es humanamente complicadísimo, tengo cosas que hacer, reuniones, trabajo, hija, la lavandería, el banco, se acabó la leche y el pan así que tengo ir de compras y el fin de semana vienen los amigos así que debo comprar flores….no, media hora más no, no way. Con ese conducta histórica mía, cómo voy a estar cinco horas en un lugar, sin mi celu para saber cómo está mi hija, si almorzó, hizo su siesta y jugó, sin responder correos, sin conectarme con el mundo, 5 horas en un montón!!!! Casi casis me da pero mantuve la cordura, porque digo, él estaba emocionado y no podía malograrle el chiste.

En el fondo, la verdad es que me sentía egoista de pasar cinco horas de mimos, era demasiado, no era necesario, con media horita me conformaba, por qué tanto? Te juro que le di mil y un vueltas y el trasfondo del asunto era que me sentía culpable de pensar que me iba a desconectar del resto (¿y si me necesitan?) para que una mamacita me haga lo ultimitito en reflexología. ¿De verdad lo necesito?

Saqué mi cita para la una en punto de la tarde y pensé mil posibilidades. Partir el Day Spa en dos, si no me dejaban iba a decir que me duele algo y terminar más temprano, o qué se yo, así que cuando llegué, acelerada como el corre caminos con mil pensamientos y pendientes y culpas encima me fui con una verborrea de necesidades encima de la señorita recepcionista, a la que le suplicaba que por favor corte los tratamientos por la mitad. Vas a tener 25 minutos de sauna seca y 25 minutos de sauna de eucalipto. ¿25 minutos? No, déjalo en 10. Vasa a tener 20 minutos de jacuzzi….noooo, déjalo en 10 también. Qué más podemos cortar, le pregunté porque me dijo que el día se tomaba completo porque era un circuito donde todo tenía relación con lo anterior y partirlo en dos partes, simplemente no tenía sentido. Así que acordamos a las cuatro en punto yo debía estar de salida. No había entrado…pero ya quería estar de salida.

Su calma era tal, su amabilidad era tal que traté, traté de bajar las revoluciones de mi mente peligrosa (enfatizando en que debía salir 4pm). En seguida vino una muy pero muy amable señora que me llevó al baño, me dio ropa para que me cambie y con una paz interna digna de algún Peace Maker internacional vestido de naranja, me dijo que deje mi teléfono, que me cambie tranquila y le avise cuando esté lista. Hice mi última llamada a casa, revisé mi correo por última vez y los comentarios del blog también, porque a veces estos se quedan en la bandeja de pendientes y ustedes piensan que no los quiero aprobar, y dejé todo atrás, pidiéndole a la virgencita que la señorita recepcionista le haya dado mi encargo a esta nueva y amable señora para que mi tratamiento acabe a la hora. Una hora menos me sonaba un poco más sensato.

Las batas eran deliciosas, las toallas gruesas y tibias, el ambiente de lo más relajante que te puedas imaginar y así entré a la primera sauna, me invitaron algo de tomar, pasé a la siguiente sauna tratando de encontrar un reloj dónde ver la hora. Al verme, la señora, con voz de calma otra vez me dijo que no me preocupe, que todo estaba coordinado pero aún yo no sabía bien si confiar o no. Para el tercer tratamiento, que es una exfoliada completa con unas aguas que te caen por todos lados masajeandote la vida y todas tus ideas, yo estaba casi casi rendida ante los encantos de engreírme una tarde entera.

Pasé al jacuzzi y nunca me había bañado con tanta pero tanta espuma, era de película, te lo juro. Me bañaron en leche de cabra (sí, no me bañé yo si que una señora de lo más dulce me bañó) y luego pasé a una habitación oscura (ya estaba casi por completo rendida) y por última vez pregunté la hora. En esa habitación perdí el conocimiento. Me embadurnaron en aceites y me masajearon desde la punta de los pies hasta cada espacio que hay entre dedo y la palma de las manos (qué rico es el masaje en las palmas de la mano!) y dedo entre dedo, la cara y el cuero cabelludo también. Lo perdí todo. La señorita masajista, extraordinariamente amable ella también, me dijo que volvía en un ratito y cuando lo hizo, yo estaba casi casi babeando en la almohada y sumida en el más profundo sueño. Por un (largo) momento mis pensamientos se detuvieron para darle espacio a la nada, al vacío, al blanco más blanco que pueden encontrar cuando alguien te dice que pongas tu mente en blanco. Me fui por un momento de mi, de mis responsabilidades, de mis deberes y de mis pendientes para no hacer más que perderme en la nada.

Luego vinieron los faciales, el descansito (y es que que descansar del relajo) y sí, a las cuatro en punto estaba lista para salir. Increíble experiencia la mía.

Que si te lo recomiendo? Totalmente, porque nos lo merecemos. Desconectarnos de la vida por unas horas no está mal, al contrario, te digo que lo puedes hacer y que hasta bien te va a hacer! Si te lo puedes dar tu misma o si te lo pueden regalar, como sea, cada quien con lo que puede pero hazlo, hazlo! Mi próximo engremiento será una pedicure spa, y es que si bien he descubierto que soy capaz perfectamente de pintarme sola las uñas de los pies y charito en la esquina de mi casa me hace un trabajo bastante decente por 25 soles, se me hace que una pedicure High Profile en un lugar como estos, debe ser un lujo que vale, aunque sea cada seis meses, hacerlo.

Gracias a mi esposo por este regalo, gracias cielo y que vengan más! :P

26
Post relacionados

Comentarios

  1. Luz Leon

    Acabo de regresar del spa contigo. Que risa. Me he imaginado tu cara, jaja. Que lindo. También me gustaria un dia asi…

    Reply
  2. Ana

    Viví cada momento contigo GRACIAS!!! Realmente una experiencia MARAVILLOSA! ilusión : Quierooooooooooo! Realidad: no tengo $ Cuanto costará? :'(

    Reply
  3. Luisa Suárez Alva

    Que bonito regalo Seren pero ¿no sería mejor el regalo si tu esposo se queda con tu hija las 5 horas y tu te quedas más tranquila en el spa?

    Reply
  4. Yamil Cáceres

    Me encanto! Soy recien casada, bueno en mayo cumplo un año, y me encanta consentirme con masajitos y esas cositas para estar siempre linda pero sólo me quede pensando: Ser mamá realmente deja tan poco tiempo? :/ Me imagino que debe ser una locura maravillosa…yo ya muero por se mamá y pasar por todo eso :D

    Reply
  5. Mariela

    Jajaja que risa y que envidia el buen rato que pasaste en el spa….a mi el remordimiento de dejar sola a mi hija de casi 8 anios no me deja ir a Las Vegas con mis amigas.

    Reply
  6. Steffany Tuesta

    Vanessa, todo muy lindo pero concuerdo en algo totalmente: EL MASAJE DE MANO es una delicia total. Sentir hormigueo por el cuerpo cuando tocan ciertas partes… delicia!!

    Reply
  7. Erica

    …muy bueno, el spa de Amarige es recomendable, el personal es muy amable, el ambiente súper relajante y ni te das cuenta de que pasan las horas; un regalo bien merecido ;)

    Reply
  8. Mariella

    Realmente me hiciste recordar las dos veces que me mi esposo me dio ese gustito! Ahora soy mama de una hermosa bebe de 3 meses así que imagínate! Jajaja será ya para le próximo año!

    Reply
  9. Giannina

    Vane!! No sientas culpa nunca de dedicarte a ti misma también!!! Creo 100% que ser madres no debe ser sinónimo de dejar de ser mujeres!!
    Que bueno que pudiste realmente relajarte y olvidarte de todo y es que a veces, caer en la nada es lo que uno necesita!!!
    Sólo eran 5 horas, no dos días, estoy segura que el mundo podía esperar (y tu mami o alguien de confianza encargarse de Valentina para que estés tranquila)
    Besos! :)

    Reply
  10. Carla

    Vane que linda experiencia voy a sacar cita en el Spa para relajarme sin sentimiento de culpa jjeje por un par de horas el mundo no se acaba cuesta entender … Besosos

    Reply
  11. Diana Pinedo

    Hola Vane, si en verdad que todas necesitamos un tiempo para relajarnos, hay varios tratamientos que duran menos que tambien nos ayudan a relajarnos , a mi una vez me regalaron uno de los tratamientos en Amarige tambien, creo que duraba una hora o 2 horas no recuerdo porque estando ahi pierdes la nocion del tiempo, al final me dijeron que podia entrar a descansar en un cuarto que estaba acondicionado para eso, pero como yo estaba apurada entre un minuto y me cambie volando, despues como que me arrepenti porque al estar ya relajada al momento de entrar a ese cuarto hubiera podido descansar plenamente, pero volvi a la rutina del corre corre… creo que si decidimos ir al SPA, debemos enfocarnos que es el día para relajarnos ya sea una mañana o tarde de bajar las revoluciones y relajarnos, porque nuestro cuerpo se lo merece ;)

    Reply
  12. Fabiola

    ay vane me has hecho reir mucho jajajaa y me encantó la experiencia ahorita mismo llamo y pregunto cuanto cuesta esta maravilla y quiero uno para mi ya.. que como tú dices me lo merezco

    Reply
  13. Melina

    Imaginarme en ese Day Spa me pareció una experiencia taaaaan rica, que casi casi también babeo el teclado de la laptop jajajaja
    P.D: Sé que los precios de los regalos no se preguntan pero si nos pudieras dar el dato, te lo agradecería un montón!
    Un beso!
    http://mamayoblog.blogspot.com

    Reply

Agregue un comentario

Su dirección de correo no se hará público. Los campos requeridos están marcados *

Usted puede utilizar las etiquetas HTML y atributos: <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <strike> <strong>