
Mi historia con Cristina Risso, creadora de Risso 1561 es bien pero bien Serendipity (encontrar lo que no buscabas). Ella conocía mi blog mientras vivía en España y estudiaba el oficio de sombrerería, un día leyó sobre mi en una revista Española en el pueblo dónde vivía, qué hacía yo en esa revista? quién sabe, y se animó a hacerme un prendedor, que pueder ver acá, esto allá por el 2010, o sea, hace cuatro años y sin conocernos. Luego resultó que teníamos una amiga en común y hoy, ella volvió a Lima y ayer mientras estaba trabajando en un café -sin conocer a Cristina ni por foto- nos miramos un segundo y yo supe que era ella y ella supo que yo soy yo, jajajaja. Claro, tuve la gran pista de que ella tenía al lado suyo una caja porta sombreros como esas redondas de Louis Vuitton que les mostré hace un tiempo, y sabiendo que es la única diseñadora de sombreros (y más) en el Perú, tenía que ser ella. Ya era hora.
No es que ya era hora de conocernos, que sí, también lo era porque sabía de su existencia hace varios años ya y últimamente lo de los sombreros y el cuidado de la piel del rostro me lo he tomado muy a pecho, digo…ya ando de cumplir 36 añazos y eso me tiene con todos los muñecos encima pero ese no es el tema de este post. Ya era hora de que llegue a Lima este arte tan europeo que es el de llevar sombreros, tocados y demás, por muchísimas razones. Desde la más sencilla, y es que son elegantísimos y nuestro repertorio de levantar cualquier simple vestido con un collar se ve limitado a eso, a las joyas, cuando un lindo sombrero podría hacer de las suyas y sorprenderte. Otra, y tal vez una de las más importantes, es porque realmente chicas, debemos de cuidarnos el rostro más que nunca.
Este verano no es igual al anterior, ni al anterior que ese, ni al de hace cinco ni 10 ni 20 años. Cada vez el sol quema más, daña más y las manchas y lunares y pecas y enfermedades de la piel están a la orden del día. Ya era hora de que además de los lentes de sol y del bloqueador incorporemos a nuestro estilo de vida un sombrero. Si ya te concientisaste y usas sombrero en la playa, ya tienes parte del terreno ganado, ahora sólo falta llevarlo a la ciudad. Piensa además en ese matrimonio liiiiiiindo de tu amiga a medio día en la playa. O sea, te vas a achicharrar (y achicharrarse NO está de moda), tu maquillaje (y que no te cuenten el cuento de la ampolla) se va a malograr y de todas maneras, tu peinado se va a desarmar a las tres horas porque nuestros indicadores de humedad vuelan por la estratosfera.
Así que como no llevar así como un lindo vestido corto, un bello y romántico sombrero para protegerte del sol y levantar a punta de pura elegancia tu estilismo de turno? Creo que a estas alturas de nuestras vidas, el qué dirán ya no nos afecta, nuestra salud es prioridad y ya todas, con tanto blog de moda y facebooks de referencias, estamos dispuestas a ir un paso más allá para marcar la diferencia. ¿O no? Diferenciate. Sé única y sé consciente, que si no te cuidas tu, quién te va a cuidar?
Y así, Cristina Risso vuelve al Perú para darme en la yema del gusto y darse el GRAN trabajo de desarrollar un mercado inexistente, el de los sombreros, en una ciudad donde sólo el 1% los usa y yo apuesto al 100% por su trabajo, porque creo en él (y me encanta). Y es que después de tantos años de saber de ella, poder hoy presentarles algo de su trabajo es un gustazo. Además, en Mayo tengo una boda a medio día en Cajamarca (o sea, sol directo a la retina) así que ya sabes por dónde empezaré esta vez a armar mi look, por el sombrero! Risso 1561 trabaja de forma personalizada, con materiales naturales (nada de sintéticos acá) todos sus sombreros, tocados y joyas de forma personalizada, agregando un toque vintage, en ediciones únicas y confeccionados de forma artesanal. Es el espíritu de antaño, el del trabajo a mano en su máxima expresión y me ENCANTA.
Acá les dejo con algunas de sus piezas y verán también que tienen algo para las novias, diseñando a mano tiaras y tocados.
Tocados:
Y te decía, trabajos manuales para las novias también.
Este por ejemplo, que lo vi ayer en persona, es un casquete en guipur dorado que lleva unas ligeras incrustaciones de Swarovski y sirve como base para sostener el velo, súper discreto y romántico.
Para contactarla, visita su FanPage Risso 1561 haciendo click acá y me cuentan por ahí que ha puesto un centro de operaciones en LalaLove así que puedes ver estas bellezas en vivo y en directo, previa cita.
Lindos diseños,felicitaciones!!
Wowww, me encanta! Lo mejor para Cristina!!
Espectaculares. Muchos éxitos para Cristina en su emprendimiento.
Qué genial, amo los sombrero y acá en Lima no se usan mucho, sobre todo en invierno. Me encantaron los ojos bizcos de la modelo que le dan ese factor x que tenía Lauren Hutton.
ojala en Lima se pusieran de moda los sombreros, me gusta la idea y la proteccion que ofrecen
Sombreros preciosos, bravo por cristina