No es fácil, oh no. Todos mis conocimientos e investigaciones sobre el mundo de un bebé de dos años, y de los niños en general me decían que negociar y explicarles por qué sí o por qué no era fundamental. Pero Dios sabe (y todas las mamis del mundo también) que del dicho al hecho hay mucho trecho. Con sus dos hermosos años encima, Valentina cada día aprende más, habla más, sabe más y es más pero más terca, hija, no sabes lo terca que eres!
Una de mis primeras misiones en esta vida ha sido enseñarte a pedir por favor y gracias, con la firme convicción de que cuando una dice “por favor” puede lograrlo todo en esta vida, regia estrategia la mía hacer campaña a favor de los buenos modales y que en el camino aprendas que siempre hay alguna forma para cumplir nuestros objetivos, bueno, nunca tan profunda pero sí, por favor y gracias a la vela.
Lo aprendiste rapidísimo y lo usaste regiamente hasta el día que quisiste helados a las nueve de la mañana. Te dije que no, que no es hora de comer helados, que por qué mejor no tomas todo tu desayuno, vamos al parque y después de almuerzo te doy tu helado. Me miraste con cara de que falta muuuucho para eso y me dijiste “Por favor mamá, helados, por favor?”. Cuando te dije que no otra vez gritaste helayos helayos helayos po favo po favo po favo y claro, es lo que te hemos enseñado, a pedir por favor obtener las cosas.
Ahora los limites, la negociación porque nuestra vida hija es una eterna negociación. Pero a veces me pregunto -muchas veces en realidad- hasta qué punto debo negociar con una criatura de dos años? Yo soy el adulto, yo soy la que dice que no debes meterte a la boca el enchufe ni la mano a la aspiradora. No. Y eso no está en negociación. Mi instinto me dice que luego de decirte que no, debo de proponerte otra cosa, que claro, funciona algunas veces de maravillas y otras no porque tu temperamento es fuerte y cuando quieres hacer algo, quieres.
Negociamos todo el día hija. Se que me entiendes, se que vas conociendo los límites y se que a cada paso me pones a prueba a mi, y a ti misma, se que crecer no es fácil y ser mamá es un aprendizaje minuto a minuto.
Suelo estar bien con mi intuición, por lo general logro entretenerte, hacerte cambiar de parecer y que entiendas, con calma, cómo van las cosas pero otras, por mi madrecita santa, otras siento que pierdo la batalla contra una criatura de 25 meses. Eres mi negocio más hermoso y más difícil, y recién tienes dos.
Lo más increíble es que por más difícil que haya sido el día…una vez que pasamos la última batalla, la de las seis de la tarde -cena, baño, pijama-, todo está bien, te relajas, tomas tu leche y duermes como princesa y es ahí cuando mi corazón explota de amor y se que mañana volveremos a empezar, una vez más a negociar tu desayuno, la ropa que usarás, tus zapatos para ir al parque, el color de la plastelina con la que jugaremos hoy, la película de la tarde, y todo lo que tenga que venir.
Te amo princesa.
con los niños es una eterna negociación. Mi niño tiene 5 y ya estoy en el ” la mamá dice que es lo que se hace, por eso soy la mamá” y él contesta “y yo soy tu hijo!” y PLOP, a buscar mas argumentos
Estams en las mismas mi nena tine la edad d la tuya y es casi tan o mas terca, y es sorprendente como a su corta edad sabe claramente lo que quiere, pero bueno poco a poco, si no lei tu articulo hoy seguiria pensando q algo esa mal c ella o quiza yo ajajaj
definitivamente tienes más paciencia que yo jeje
Mi nene tiene 6 meses , lo adoro pero ya esta empezando con las cosillas, ya llora por lo mas minimo ,pero lo peor es q solo pone su pucheroo y como q esta a punto de hacer llanto pero como ya conmovio a todoa ya hacen su voluntad y uno de ellos es su padre. Yo soy la mala XD
La mía tiene tres y ya está en el “po favorcito mamita, tú eres linda si?” o “mami yo te quero mucho a ti, vamos a los juebos?” (son las 7a.m. de un domingo)…plop!!!
Hola Vanessa, gracias por este Post, lo escribes con el humor que me gusta y me identifico, ando casi igual con mi Principe de 2 annos y medio. Saludos desde Alemania Carla
Woww pues estoy entrando a esa etapa, mi bebe tiene 01 año y 03 meses y llora hasta por lo más mínimo, quiere todo y cuando se lo doy ya no lo quiere y lo tira, aún no puedo negociar con ella, pero ya le estoy poniendo ciertos límites como el “NOOOOOOOOOO” jejeje… la batalla de las madres de nunca acabar, fuerza chicas….
Quizá sirva explicarle de forma lúdica que hay cosas negociables y otras que no lo son; y cómo esas cosas no negociables no solo lo son para ella sino también para ti y su papá (es decir, si ella no puede comer helado antes de las 2pm, entonces tú y su papá tampoco), porque es la única forma de estar sanos, felices y tranquilos :).
Si puedes negociar con ella, ya es un triunfo; yo después de haber tenido un hombrecito que era un santo, con quien la negociación era pan comido, me enfrenté a una mula tucumana, con quien, desde chiquitita, era imposible negociar el mínimo; cuando decía No era Manan! Consuélate, hay quienes la hemos pasado peor, y es un decir, pues en realidad apreciaba del carácter fuerte que demostró desde enana. Disfrútala y hazme caso, anota las cosas que dice; uno después se olvida, y son cosas tan graciosas!
Efectivamente la negociación con nuestros hijos es la batalla de todos los días y a medida que se hacen mas grandes la negociación se vuelve mas dificil. La mía tiene 9 años y es mi adoración nos llevamos súper bien, hacemos todo juntas hasta que llega el momento del “no estoy de acuerdo” o “porque? No me gusta”, y es un tira y jale de quien cede. Sin embargo este tire y jale es la mejor experiencia para mi, verla como ha crecido con los años, como fundamenta su opinión, como busca soluciones, como trata de convencerme es una sensación indescriptible, así que sigamos en la hermosa lucha de la negociación
A mi lo que me funciona es decirle (cuando no hay espacio para negociar, cuando la salud o la seguridad es lo más importante): Como mamá, una de mis responsabilidades es protegerte y cuidarte. No puedo permitirte que hagas XXX porque te podrías hacer daño (o hacerle daño a otra persona/animalito) o podrías romper XXX (por ejemplo, si quiere tirar una pelota dura hacia la luna). También me funciona decirle para qué sirve algo: el enchufe es para conectar el iPad (o cualquier otra cosa), la silla es para sentarse (si está jugando parado en una silla).
En cualquier situación, recordar que no lo hacen para contradecirnos, si no porque están explorando y aprendiendo acción-consecuencia.
mi bebé tiene 18 meses y no da lugar a nada… siento que ni me escucha cuando le digo algo, lo mas trisye es queno quiere comer y yo estoy tan desesperada… la amo con todo mi ser y me paralixa elmiedo de estar haciendolo mal con ella…