
- Sentir miedo es perfectamente normal. Desde que descubres que estás embarazada hasta el momento en que tienes a tu bebé en brazos por uno, dos o varios días, sentirás una mezcla de emociones entre felicidad, angustia, desasosiego y miedo también. Porque no tu cuerpo cambia, tu mente cambia, te enfrentarás a situaciones nunca antes vistas y la mayoría de veces no sabrás cómo reaccionar y eso, da miedo. La vida de alguien ahora depende de ti y claro que esto asusta. Esta bien sentir miedo, todas lo sentimos y solamente el tiempo lo irá sosegando.
- Tener un bebé por parto natural o por cesárea no te hace ni más, ni menos madre y no dejes que nadie te diga nunca jamás lo contrario, ser mamá en todo el sentido de la palabra va mucho más allá de eso. Claro que muchas soñamos con un parto vaginal tranquilo y perfecto, sentir el dolor necesario para traer a nuestros hijos al mundo, pero hay veces en las que simplemente no se puede, y ya. Cuando tuve a Valentina, todo parecía indicar un parto vaginal. Rompí fuente de madrugada, luego el tapón, las contracciones….hasta que luego de casi 8 horas de trabajo de parto no dilaté ni medio centímetro, ni un cuarto de centímetro, ella no estaba encajada y mi doctora me dijo que debía ir al quirófano. Me sentí mal, lloré de rabia y frustración por no poder hacer por mi hija lo que “todo cuerpo de mujer está destinado a hacer”. Pensaba que le había fallado y que ese era solo el comienzo de una serie de fallas mías, como de quien comienza algo con el pie izquierdo. Y hoy puedo decirte que no hay nada, pero nada más lejos de la verdad. El parto no te define como madre, mucho menos como mujer. Como leí por ahí, nacer por cesárea es también una forma sagrada de nacer, y debes de respetar tu cuerpo por eso, así como el nacimiento de tu bebé. Hoy, con Sebastian, aspiro nuevamente a vivir la experiencia de ese paro vaginal del que tanto hablan pero sé que es más por un tema personal -quiero vivir esa experiencia de ser posible- que por sentirme mejor mamá. A puertas de empezar la semana 38, sé que Sebastian no está colocado aún, anda con vuelta y media de cordón y sin mucho espacio ya para moverse así que si lo que Dios tiene planeado para mi es un cesárea, que así sea. Yo podré todo de mi parte para ser la mejor mamá cesareada del planeta y así poder cuidar a mi hijo, a mis dos hijos, como mejor sé hacerlo.
- Algo similar ocurre con otro tema, la lactancia. Personalmente, fue una experiencia maravillosa para mi y Valentina. Pude dar de lactar sin mayor problema, con muchísima producción de leche y sin más complicación que una corta mastitis en el camino, nada que no pudiera dominar. Los beneficios que tiene para el bebé como para la mamá son innumerables, insuperables y si me preguntas, la recomiendo al 100%. Pero sé también que puede ser frustrante, que puede ser muy doloroso y lejos de ser una bonita experiencia para algunas mujeres y por distintas razones, cada mujer en un mundo. He visto amigas sufrir verdaderamente, intentarlo y con lágrimas en los ojos sentir que no dan más con sus cuerpos y lo cierto es que no creo, y esto es una opinión muy personal, que sea necesario pasar por una situación así. La maternidad es lo suficientemente compleja tal y como es, especialmente al inicio, con amanecidas, dudas, miedos y esa descompensación hormonal como para encima sumarle un trauma más. Entrégalo todo en la cancha y si luego de intentarlo descubres que la lactancia no te va, créeme que tu hijo se sentirá igual de amado y unido hacia ti si le das un biberón con leche de fórmula, lleno de amor.
- Eso sí, mi leche se la di directo de la teta así como con biberón desde el día uno porque yo volví a trabajar de forma casi inmediata y necesitaba que ella se acostumbre a ambas formas en caso yo no esté para alimentarla.Y como salía a trabajar, así como dejaba mi leche a la mano, dejaba mi lata de formula no vaya a ser que pase la mosca, se les caiga, se ensucie o lo que sea, mi prioridad fue siempre que ella no pase hambre
- El enamoramiento por tu hijo y ese amor abrumador que muchas mujeres cuentan sentir de forma inmediata, no siempre ocurre desde el día uno, y eso está bien porque todo tiene su proceso. Los primeros días yo no sentía más que pánico de saber que a hora ese pedacito de gente dependía de mi, que era mi responsabilidad que se alimente, que duerma, que no escalde, que no se llene de gases (te juro, tengo un video antes de salir de la clínica de vuelta a casa donde le hablo a la cámara y solamente le pido perdón porque no puedo sacarle ni un solo gasesito luego de su leche, y lloro y lloro solo por culpa de ese chanchito que jamás se me dio). Que dependa de mi el estar sana y feliz era, Dios mío, demasiada responsabilidad e información de arranque. No sabía cómo hacer nada, y es que ninguna madre nace sabiendo, aprendí que las madres se hacen en el camino y que si ese amor sin límites se da poco a poco, está bien.
- No hay forma correcta de hacer dormir a un bebé. En tu cama, en su cuna, en el coche o en el auto. Y acá hago mea culpa. Valentina me la puso relativamente fácil, la acostaba a mi lado, se dormía sin necesidad de estar en brazos, la pasaba a su cunita junto a mi cama (estuvo ahí hasta los 5 meses que pasó a su propio cuarto) y todo bien -la mayoría de las veces. Junto conmigo muchas otras amigas tuvieron bebés y veía como algunas se recorrían la casa paseandolos en el coche porque el bebé lloraba como loco y no dormía, o tenían que emprender un viaje en auto para que la criatura finalmente descanse y con ojo crítico -pensaba que eso estaba mal y que ellas no sabían lo que estaban haciendo. Que la boca se me haga chicharrón hoy día por atreverme a juzgar así sea con el pensamiento a una madre que trata de hacer lo mejor que puede por su bebé. No hay forma correcta de hacer dormir a un babé, cada uno es diferente y lo que funciona regio con uno puede que no funcione con otro, y punto.
- Volviendo a lo anterior, no hay forma correcta que sacarles los gases tampoco. Nos enseñaron mil formas, durante los primeros días en la clínica, cada enfermera nos dio sus mejores para lograr sacarle los gases o chanchitos a la bebé. Boca arriba, boca abajo, de cabeza, eeeen fin, cada tía, cada abuela, cada amiga tenía sus propios consejos y técnicas maravillosas y era demasiado frustrante ver cómo lo que ellas hacían en un dos por tres era simplemente territorio negado para mi. Es más, una tía cada vez que se ponía Valentina al hombre hacía silencio y me decía, ves, acá está, lo siento y pasaba a sobarle su espaldita hasta que este salía de forma casi inmediata y yo…está? ahí? DÓNDE!!!! No lo escucho, no lo siento….soy una maña mujer! Al final, mi esposo logró dominar una que otra modalidad y luego nos acomodamos a la rutina de yo alimentar al bebé, él sacar los gasesitos hasta que poco a poco me sentí más cómoda y confiada con la situación.
- Con chupón o sin chupón, da igual. Me tomé unas cuantas semanas antes de ponerle chupón a Valentina porque sentía que ella estaba en su derecho de llorar todo lo que quisiera y que yo no podía ni debía silenciarla con un chupón. Es más, solté una lágrima al hacerlo pero sabes qué, no pasó nada malo, ¡todo estuvo bien! Hay bebés que usan muy bien el chupón desde el inicio y otros que no lo quieren, hay bebés que lo usan por determinado tiempo y otros a los que hay que quitárselo (yo aproveché un viaje que hicimos cuando ella tenía año y medio para quitarle el chupón y todo funcionó bien, como estábamos en un lugar nuevo no lo extrañó ni lo pidió). No hay reglas acá.
- Eres la mejor mamá para tu hijo, así de simple. Dios te puso en su camino por una razón, porque El sabía que eres simplemente perfecta para tu bebé así que no lo dudes ni por un segundo. Y con decir perfecta no me refiero a que debas ser la madre perfecta, la madre del año que nunca se equivoca y que todo lo sabe, sólo debes llenarte de amor, de paciencia -que viene con el proceso y no es inmediata-, relájate, juega con ellos, baila, canta, salta, pinten y ensucien todo juntos, abrázalo y bésalo hasta cansarte, sé la mejor mamá para las necesidades de tu hijo con la plena certeza de que él llegó a tu vida por una razón.
- Todos tiene una opinión. Todos tienen algo que decir sobre esto o aquello. Tu tía, tu suegra, la vecina, tu amiga….algo pasa en las mujeres especialmente cuando nos convertimos en madres, que queremos ayudar y compartir nuestras experiencias con otras mujeres todo el tiempo, en todo momento y aunque no nos lo pidan. Escucha siempre y saca tus propias conclusiones. Recuerda que eres única así como tu hijo es único también, nadie lo conoce más que tu y nadie quiere su bien más que tu. Así que no te abrumes con lo que todos dicen y sigue intentando ser día tras día, ser la mejor persona para él o para ella. Estoy segura que lo estás haciendo más que bien.
Y hablando de hijos, les dejo con unas fotos que nos tomó nuestra buena amiga y una trome total de la fotografía Ale Behr en Punta hermosa hace un par de semanas (mi vestido es de My Bump, realmente sus vestidos me han salvado este embarazo!). ¡Lindo fin de semana!
Hola Vane, entiendo todas esas emociones perfectamente. Mi hijita hoy cumple dos meses y a veces me cuestiono si estoy haciendo las cosas bien pero sé que las hago con amor y hago lo mejor que puedo así que sí, creo que si estoy haciendo las cosas bien. Convertirme en madre ha sido lo mejor que me ha podido pasar, tuve un embarazo muy complicado y el parto también lo fue, así que tener a mi bebé en mis brazos se sintió maravilloso. Mi esposo y yo disfrutamos mucho de ella.
Un beso y felicidades a los tres por esta nueva personita que llega a alegrarlos
Vane, te sigo desde tus inicios, en dos ocasiones conversamos por que tengo una marca. estoy asombrada por todo lo que has conseguido y sobre todo haber hecho un libro increíble con el embarazo y todo, de verdad eres un ejemplo a seguir, yo cuantas veces he querido abandonar todo pero viéndote a ti me da ganas de seguir luchando por mis sueños para luego cumplir los sueños de mis hijos, tambien soy mama de un chico de 16 años y un bebe de dos años y me estoy volviendo locaaaa, encima voy a empezar a estudiar una carrera, la que nunca termine por varias cosas que sucedieron, una de esas fue ser mama muy joven, espero volver algún día encontrarnos, Muchas Felicidades por todo, gracias por enseñarnos con tu ejemplo que se puede hacer todo en esta vida, sin drama.
Me encanta toda la sinceridad que expresas al escribir tus experiencias, yo no soy mamá pero el día que lo sea quiero tener esa fortaleza que tú tienes para manejar tan bien la maternidad, el trabajo, el rol de esposa y de mujer tan emprendedora. Te conozco porque gané uno de los premio que sorteaste hace dos años y me acuerdo que pequé de imprudente y pregunte si pensabas tener otro bb, a lo que tu respondiste que sí y mírate ahora con tu familia feliz y tan linda. Felicidades x todo Vanessa, que todo sea prosperidad en tu vida.
10 puntos a este post Vane! En mi caso entre a mi embarazo totalmente preparada, y tuve un embarazo tan lindo y eh llegado a la conclusión de que es tan importante prepararte psicológicamente y lo digo por que entre a mi embarazo y yo lo quería y lo busque y fue maravilloso, en cambio por el parto no me pasó así, y es que todo mi embarazo me preparé para un parto natural, y por esas cosas de la vida tuve que cambiar el chip de un momento a otro y fue realmente horrible y traumático para mí! Relativamente entre a sala de operaciones llorando y hasta fue frustrante para mi esposo verme así. Y es que estaba preparada para sentir contracciones, para recibir a mi gorda de manera vaginal y poder cargarla y darle mi tetita ni bien saliese de mi barriguita y nada de eso pudo pasar sin contar lo horrible que fue para mí que nunca había tenido una operación la cesárea fue fea es más dos meses después puedo contarlo sin llorar pero cada vez que alguien me visitaba y me preguntaba por el parto yo no podía contener mi llanto y eso le seguimos sumando el post parto tan doloroso después de una cesárea no poder cargar tu bebe tener que depender de alguien hasta para ir al baño es todo esto bien complicado creo que otra hubiese sido mi historia si yo me hubiese preparado en mi embarazo para las dos opciones mi error fue cerrarme a solo querer un partir vaginal
ojalá que esto le ayude a las mujeres que es muy importante el estar preparado psicológicamente para todo lo que conlleva ser mamá! Yo por ejemplo llevo una lactancia muy linda y disfruto mucho de poder darle mi tetita a mi bebe y felizmente mi depresion post parto no duró más que una semana, es tan importante tb el apoyo de tu esposo creo que no lo hubiese podido hacer sin el ❤️
Suerte con la llegada de Sebas!
Y mucha felicidad y amor para todo tu familia ❤️
Me emocioné viendo tus fotos.. muy lindo todo.. que emoción ya llega tu bebé… ay recordar esas semanas cuando llegó mi nena, que es la segunda, en la clínica es lo máximo, ahora tiene 7 meses mi reina y mi hijo de 4 está super celoso.. tengo que llenarme de mucha paciencia….
Me emocionó este post. Gracias
Vane:
Luces preciosa con tu pancita.
Valentina, es una niña bella y feliz, es algo que se nota en sus ojitos.
Tienes un esposo increíble, por ende una familia increíble.
Finalmente, tu post me hizo llorar. No soy mamá, pero espero algún día serlo.
Un fuerte abrazo y bendiciones!