16 de Abril del 2012
Del embarazo y Otras virtudes
Qué tal tema, no??? Hay versiones, historias y cuentos para todos los gustos y colores. Cada cuerpo es diferente y cada embarazo también.
Yo voy por la semana 18 de mi embarazo (mañana 19) y aún no me hago la ecografía para saber si mi bebé será una pequeña Serendipity o un mini Chepis. Y que por qué no me la hago??? Es la pregunta que TODOS me hacen. Mi primera idea es porque soy una chiva/miedosa que aún quiere pensar en su bebé. O sea, saber si es hombre o mujer hará la situación más real que nunca, sabré si es mi niña o mi nené y si bien tengo todo más que asumido, no saber el sexo aún hace que la situación sea un poco más light, por ahora.
Claro, me han dicho de todo. Que si ella lo supo a la semana 13, o a la 15 o a la 16, que por qué no quieres saber!!!! Y no es que no quiera saber es solo que por ahora prefiero no. Es más, el jueves tengo ginecólogo y seguro que ya me manda la orden y que la próxima semana les vengo con la noticia pero por ahora déjenme pues, aún no estoy lista, aún no. Cada cuerpo es diferente y cada embarazo también.
Luego, lo segundo, es que todo apunta a que lo más certero es la semana 20 y no quiero que me anden cambiando las cosas, prefiero una sola y bien definida respuesta y semana 20 está a la vuelta de la esquina así que a todos los que me preguntan, paciencia que pronto lo sabremos.
Cuántas preguntas y dudas, no???
El mismo embarazo en sí es una gran incógnita. Yo les he contado que no he tenido ningún síntoma, tan solo ganas absolutas de dormir todo el día. Ni una nausea, mareo, dolor de nada. Claro, todo el mundo me dice que soy una suertuda pero es un juego súper engañoso mentalmente porque como buena primeriza que soy, quería tener esos clichés por el simple hecho de confirmar y sentirme embarazada. Sí, te lo dicen los exámenes y todo pero no es hasta el día de la ecografía y que sientes sus latidos que confirmas lo que todo el mundo ya sabe, lo que todos te han dicho. Estás embarazada. Antes, todos te tratan como si estuvieras enferma o algo y te preguntan cómo está esa pancita???!!! Cómo te sientes??? Lo hacen con todo el cariño del mundo y esperando una gran respuesta pero no, mi respuesta de siempre es Bien, todo está muy bien. Pero no vomitas? No. Antojos??? No. Nauseas!!! Tampoco. No??? Nada de nada. O sea, siento que dichosamente tengo el embarazo más aburrido del planeta!!! No señoras no, cada cuerpo es diferente y cada embarazo también.
Y te tienes que cuidar más que nunca. Porque ni bien cuentas tu buena nueva y te felicitan, empiezan las historias de ultra tumba. Que si a fulana le pasó esto, o aquello, o lo otro. O que cuando yo estaba embarazada, no sabes!!! lalalalalala, acompañado de una historia terrorífica en algunos casos con finales felices y otros finales que mejor nos tapamos los oídos. Y no es que una no quiera estar prevenida ni cuidase todo lo posible. Todas esas historias son verdaderas y vienen de personas que nos quieren mucho/poco o nada, qué se yo, pero el tema es que no siempre quieres oír desgracias ajenas pues, especialmente cuando estás luchando por llevar el mejor embarazo posible aunque aún no te sientas embarazada ni de broma. Y es bien complicado.
Y te tienes cuidar más que nunca y comer bien. Y olvida el ejercicio por favor, deja el ejercicio en paz al menos hasta el 4to mes. Y déjate de hacer dieta Serendpity ah! Tal vez es lo que más ha cambiado en mi. De pasarme la vida cuidando lo que como ahora tengo que comer todo. Quinua, lentejas, arroz, papa, yuca, camote. No sabes todos los tips que me dieron, desde que desayunara morcilla hasta que llevara limones para chupar en la cartera. Mi cerebro entró en trompo y empecé a comer de la forma más desordenada y caóticamente posible, conclusión, ni una nausea pero 3.5 kilos MAS el primer mes. La doctora me puso a dieta en una!!! Y no es más que la dieta que yo siempre hacía con algunos ingredientes extras como lentejas una vez por semana y ya. Me puse a dieta y si bien no bajé de peso, al menos he logrado subir un kilo por mes el resto de meses. Ufffffff, ya me veía yo a ese ritmo haciendo un embarazo de 25 kilos, que con mi 1.58 de altura parecerán 35 kilos y que no bajaré hasta cumplir 40 años. Pero no. Cada cuerpo es diferente y cada embarazo también.
Y escuchas todas les versiones. La que subió 30 kilos y hoy está como si nada, más regia que nunca y sin una gramo de grasa. Ah! Es que dio de lactar como loca. La que subió y nunca más bajó, pobre, casi no tenía leche. La que bajó en vez de subir, y es que su cuerpo de toleraba ni la galleta de soda. La que hizo deporte como si nada todo su embarazo y comió normal. La que comió por dos, pobrecita ella. La que se lo pasó en cama. Sí, hoy todas son felices con sus hijos pero sufriendo o no la gota gorda. Cada cuerpo es diferente y cada embarazo también.
Lo cierto es que tu cuerpo cambia. No te pertenece más y hace cosas que jamás pensaste. Yo nunca pensé que mis tetas podían estar tan grandes. Y cada día crecen más. De 34B pasé a 36D en menos de tres meses. Nunca pensé que mis caderas podían ancharse de esa manera, he tenido que comprarme hasta calzones nuevos para que no me marquen el faking rollo porque mi rollo es más grande que mi panza y ni mis jeans de por si acaso me quedan. Como madre primeriza que soy casi no tengo panza de embarazo aunque esté encaminada al 5to mes pero el resto de mi cuerpo no dice lo mismo, no no no. Lo cierto es que en algún momento del día todo esto se supera y dices que chu, estoy embarazada y soy feliz pero ratos también me desconozco a mi misma.
Y te pones melancólica, porque por ratos las hormonas te juegan una mala pasada y extraño a mis amigas de la universidad, quiero volver a escuchar esa canción y busco mis zapatos Bass, a ver si los guardé por si acaso desde 1998. Y luego soy la más feliz y después reniego más que nunca por el inepto que se cruzó la luz la roja y me acuerdo que voy a ser mamá y no debo renegar pero no lo puedo evitar porque no sé por qué tanto idiota tiene brevete y llamo a mi esposo a ver si ya viene a casa porque lo extraño más que nunca. Es bien complicado. Y no puedo comer chocolate porque el bebé se altera y ya me subí 4 kilos como si nada. Cada cuerpo es diferente y cada embarazo también. Es lo que me repito cada día del señor. Y no entiendo por qué me parezco más a una Jessica Simpson embarazada que a una Alessandra Ambrosio. Injusticias de la vida. Retos genéticamente imposibles.
Esto es un poquito de catarsis, si no es acá, dónde???
Gracias por la comprensión.