Llegó el sol! Yeeeeee! A broncearse se ha dicho! Pero aguanta, tenemos que ser responsables con este tema. Hasta el verano pasado recuerdo llegar a la casa, ponerme aceite de zanahoria y tirarme al lado de la piscina desde las 11am hasta las 4pm, dando vueltas cada media hora cual bife angosto en parrilla. Pero no más, empezando porque no tenemos el mismo sol que hace 5 años, tenemos que ser mucho más cuidadosos con nuestra piel. Después de todo, belleza es salud y tampoco queremos quedar así…

Es cierto que todos queremos ese color dorado con una pizca de naranja en la piel, esa tonalidad que brilla por sí sola y que se ve A-LU-CI-NAN-TE con algo blanco y accesorios dorados, pero ten por seguro que también se puede conseguir con un bronceado seguro y saludable. Así que después de revisar algunas páginas y leer un poco sobre el cuidado de la piel, Vane y yo hemos decidido hacer un guía para que tengas ese bronceado que tanto quieres de la manera más segura posible.

Primero que nada, tienes que conocer tu tipo de piel (para saber qué tipo de piel tienes haz click acá). Muchas veces la piel más clara es la más sensible. La crema protectora, o bloqueador como se le conoce, tiene que proteger tu piel según sus necesidades. Si tienes una piel bastante sensible o no buscas broncearte, apuesta por un protector entre 50 y 80, ya sea el de bebé o el ozono, ambos te protegerán mejor que una sombrilla. En este link encontrarás el significado de cada FPS.

Por otro lado, si andas en busca del bronceado estilo modelo de D&G, anda con calma. Un protector de 10 o de 30 y puedes rociar un poco de aceite de zanahoria sobre él. La exposición tiene que ser paulatina, renueva el bloqueador cada dos horas y vuelve a tu posición de bronceado. Día a día irás ganando color, no te desesperes.

Luego de estar al sol, una vez que te alistes para la noche, humecta la piel, esto evitará que te peles y le dará un brillo especial y natural. Para poner especial cuidado en esto, Hawaiian Tropic trae una loción que además de protegerte, mantiene la frescura de la piel. La humectación es super importante si no quieres verte como culebra en cambio de piel.

En el caso que se te pase la mano y te pongas como un camarón, corre por uno de los gels de aloe vera. Mantén uno en la refrigeradora para que este lo suficientemente frío y refresque la piel al colocarlo. La piel quemada es muy sensible, hay que humectarla de sobremanera y mantenerla fresca.

Ahora, quieres un secreto para tostarte de verdad? Toma extracto de zanahoria. Sí, TÓMALO. No te lo eches encima y olvídate de la Coca Cola de Abencia Meza, el extracto de zanahoria es lo mejor que puedes usar. Yo no creía mucho en esto hasta que la semana pasada entré al blog de Snooki.. no mentira, vi a mi tío después de unos días (sí, DÍAS) y parecía que acababa de regresar de algún crucero en Mykonos. Me contó que todo lo que hacía era tomar un vaso de extracto de zanahoria antes de salir a correr en las mañanas y eso le había dado los pigmentos a la piel.

Recuerda examinar tu piel cada cierto tiempo. Cualquier lunar nuevo tiene que ser revisado. Aunque nos cueste pensar en ello, el cáncer de piel es bastante común y el verano es la mejor época del año para adquirirlo. Hawaiian Tropic es bastante consciente de esto y por eso apoya a la organización Cabellos por la Vida creada por Marco Antonio Gallegos. Ellos se encargan de donar pelucas de cabello natural a pacientes que atraviesan procesos oncológicos para ofrecerles una mejor calidad de vida. La estética en cuanto influye el autoestima, es parte muy importante del estado de ánimo de cualquier paciente y esto puede ser determinante en un proceso tan doloroso y deteriorante como lo es la batalla contra el cáncer.

Así que ya sabes, puedes conseguir ese bronceado a la Jersey Shore sin necesidad de achicharrarte. Todo es cuestión de tener los productos adecuados, paciencia y mucha zanahoria!