Alegría alegría con los bloques de color. Se trata de colores que contrastan. De combinaciones inusuales. De atreverte a diferenciarte del resto. De “abrir tu clóset y tu mente” -que ya se me volvió frase cliché. De dividir el cuerpo o una prenda a través del uso de colores fuertes y atrevidos. Uno, dos o tres colores no de la misma gama, si no que súper híper distintos entre sí. Se trata de crear y ser originales.

Aquí unas ideas: Naranja+turquesa.

Amarillo+Naranja.

Azul+Amarillo.

Esta semana, esta será la meta, jugar al color blocking. Seguro que más tarde les posteo un poco más sobre el tema. Mientras, es obligatorio ver la sección de entrevistas, donde hay una nueva al cantante y compositor Jhovan Tomasevich. Lindo día para todas!!!

¿Les soy recuuuuntra sincera? No es una propuesta que se me haga del todo descabellada. Es más, me gusta tantito.

Pero vamos en orden, ya en este post les había contado que los estampados frutales se vienen con mucha fuerza, al menos, en las pasarelas. Cuando hablamos de las grandes ligas, Prada SS 2011 propuso bananas, locas y tropicales bananas combinadas con otros estampados igual de importantes y contrastantes.

Y viéndolas bien, dependiendo de que tan canchera te sientas, este look atrevido y caribeño con alma de Carmen Miranda??? Ja!, no queda mal, sólo exótico:

Las toronjas fueron del territorio de mi amiga (jojojo) Stella McCartney, y acá es cuando la cosa a modo de un acento de color se me hace más digerible, claro, el hecho de que el estampado sea lindo tiene toooodo que ver. Es como que un collage de toronjas queda mejor que tres docenas de bananas colgadas. Lindo vestido para una noche veraniega en alguna isla perdida (bien perdida, como para que nadie te raje). En pantalones no estoy taaaaan segura, pero, qué opinas del blazer?

Rochas de decantó por los arándanos (blueberry):

Miu Miu en su colección Resort 2011 nos empapó con pequeñas y coquetas manzanas:

Lo diré en voz alta: Me lo pongo:

Devi Kroell no se bien qué frutas usó, ya? Pero también se puso en el mismo mood.

Y la ensalada la pusó Moschino Cheap & Chic, con limones:

Y Kiwis, y sandías y maracuyás sabiamente sugeridos. Otra vez lo diré: Me lo pongo.

Pero tal vez son los cherries los que han sido las “vedette” de ésta y otras tantas colecciones. Acá nuevamente Moschino:

Mi amiga Blair ensalada Waldorf de Moschino completita:

Dolce & Gabbana no podía quedarse atrás: Cerezas para todos.

Anna Sui ha sacado su shortcito (con camisa más) de cerezas, lo que se me hace muy adorable, es como con los pasteles, una forma de volver a la niñez, aunque el modelito en sí del short con esos bobos/aletas a los lados se me hace bien poco favorable:

Y MNG estampó a Scarlett con cerezas de pies a cabeza:

Marc Jacobs sacó una suerte de balerinas (se acuerdan de las “chinas” que usábamos antaño???) que como si la fruta fuera poco, llevan tremenda flor de detalle:

Y claro, están las que llevan las cosas a ooootro nivel: Anna Dello Russo con una sandía en la cabeza:

Yo opino, que me gusta (no Anna, claro está!), que una pieza frutada no le vendría nada mal a mi clóset. Supongo que habrá que esperar un año al menos para encontrar algo así de frutado en Lima, y un par de años para que la propuesta realmente calce en nuestra sociedad. Pero seamos optimistas. Las propuestas están hechas, ahora solo queda atreverse y que cada una las “abrace” según su propia personalidad. Se trata de disfrutar chicas, se trata de disfrutar.

He terminado de ver este video unas cinco veces y no tengo nada más que una sonrisa en los labios y chispitas mariposas en el alma.

Se trata del esperado regreso de Tom Ford a la moda femenina. Después de YSL y Gucci, el diseñador Tejano se dedicó a productos de belleza, ropa de hombre y de producir un film, hasta Septiembre pasado cuando en absoluto secreto lanzó su colección Spring Summer 2011. ¿Por qué nos demoramos taaaanto en contarlo?. Porque a ese desfile se prohibieron cámaras y celulares. Sólo el lente de Terry Richardson que fotografiaba al ritmo y flirteo de las modelos estuvo presente. Las modelos. Mujeres importantes de todo el mundo, entre ellas Beyonce, Julianne Moore y Daphne Guinness. Se prohibió decir el lugar o la hora. No bloggers, no twitters, nada de Facebook. Fue un absoluto secreto (junto con el de Marc Jacobs) apenas revelado cuando la colección estuvo a la venta, como en los viejos tiempos.

Pero esto señores y señoras, no se trata de ropa, de qué me pongo o qué se usa. Se trata de un show mágico, de cosquillas en la panza. De un secreto, de elegantes colores, de telas lujosas y de la seda como protagonista. Se trata de ser sexy y altanera, de escotes, smokings, pelos alborotados y labios rojos. Se trata de tacones, de mírame pero no me toques. De lo que quieres tener pero no puedes tener. Se trata de lujo, de magia (otra vez?), de tener los sentidos alertas para verlo todo sin perderte de nada. De ser una diosa, de sentirte inalcanzable, de gafas oscuras y sonrisas escondidas. Se trata de los setentas, el negro, el animal print y las lentejuelas. Se trata de vivir para la moda. La razón de ser este blog, lo que me hizo vibrar cuando tenía 13 años y descubría este mundo.

Se trata de aplaudir como loca porque un espectáculo acabas de ver.

Si la colección anterior nos recordaba a una mujer ejecutiva y poderosa de Wall Street, esta vez la cosa se pintó distinta. No se si futurista sea la palabra, es más como que, de otro planeta. Pero veamos. Primero lo primero, fue la inspiración que tomó del brillo que tienen las piedras preciosas que hizo que estas telas parecieran metales líquidos vistiendo a las modelos con todo tipo de prendas posibles. Blazers, pantalones, faldas, leggings y por supuesto, vestidos, que a su vez se mostraban acompañados de “pintorescos” sombreros de Philip Traacy.

No puedo si no robarme las palabras de Tim Blanks cuando dice que esto era un “sci-fi extravaganza” mujeres princesas y poderosas, de una galaxia lejana que con prendas similares a las que usamos en la tierra, lograban brillar con luz propia (y la iluminación de la pasarela, claro está).

Especial acento en los labios, sombreros que esconden la mirada, formas curvas que rodean las siluetas de forma casi mágica (y digamoslo, sumamente favorecedora, saca cintura y entalla caderas como la mejor), un especial énfasis en los hombros y el maravilloso efecto sorpresa que revela una linda espalda cuando menos lo pensaste.

La inspiración glitter no solo la vimos en las telas, las piedras también estuvieron vistiendo el cuerpo de las modelos, chaquetas y accesorios.

Claro que hubo mucha joyería, y amo cuando una mujer sabe llevarlas en la misma mano que lleva la cartera, porque se crea un efecto de seguridad y confianza, de que sabes lo que haces. Y hablando de carteras, las hubieron grandes, chicas y medianas, para todos los gustos.

A diferencia de la pasarela de Valentino, acá los zapatos si llevaron unas pequeñas plataformas y los tacones fueron protagonistas de esta vista extra-oficial (y extra terrenal). Ya sean de cuero, forrados en tela o incrustados con pedrería, todos siguieron una forma almendrada y un poco afilada en la punta, con tacos gruesos para una mejor pisada.

Algo deconstruído también, como quien parte el cuerpo en dos y deja por ahí un agujero que no muestra piel, si no el contraste de dos telas, de dos colores. Esto sí que no me gustó, lo siento.

Con aretes o sin aretes, no importa en realidad porque el acento lo pone el sombrero, detalle que espero se vea más en pasarelas (pero que no se convierta en obsesión, ahí sí que me arruiné).

Como dije al principio, de otra galaxia más que futuristas. Son mujeres como uno (claro!), que quieren verse bellas y destacar. Me gustó la colección, fue inesperada y la sentí muy personal para Mr. Armani.

No hace mucho más de un par de semanas, se presentaron las distintas colecciones Alta Costura Primavera Verano 2011. Colecciones muy esperadas no solo por su escasez -si queremos hablar de Alta Costura propiamente dicho-, si no por ese espectáculo fantasioso y algunas veces algo absurdo que vemos en ellas, diseñadas para vestir a las mujeres que no necesitan más ropa, a las ricas y famosas que todo lo pueden.

Para mi, estas colecciones no muestran tanto un efecto sorpresa (aunque Chanel y Armani este año sí que lo hicieron) si no que buscan en el ADN de la marca una nueva forma de hacer cosas bellas y no necesariamente usable. Ohhhh, la Alta Costura, un espectáculo para ver, y si eres lo suficientemente sagaz, para aprender.

Desde hace ya un par de temporadas que la Casa Valentino está a cargo de Pier Paolo Piccioli y Maria Grazia Chiuri. Dos chicos a los que después de tener muchos años trabajando para Mr. Valentino, finalmente les dieron el V°B° y aunque no anden haciendo colecciones rompedoras, saben rescatar y re-interpretar la esencia de la marca.

Esta vez, se entrelazó la inocencia de vestidos blancos y off-white, volados, lazos, gasas, encajes y chifones, flores y detalles de pedrería, con la rigurosidad del peinado de Jane Eyre (no has leído Jane Eyre??? Pues vaya usted y hágalo ahora mismo que ese es clásico de la literatura, pero para que me entiendas, muy de institutriz) y un maquillaje que a decir verdad, parecía de chica enferma.

La paleta de colores fue así: Del blanco, al nude, acentos de rojo, rosa, algo de celeste y blanco otra vez.

Algo que me gustó mucho fue la constante insinuación, pero cero revelación. Las telas eran tan ligeras y en colores tan piel, que parecía que veías algo pero era plancha quemada. Otro de mis favoritos (y a tomar nota) es el regreso de los zapatos medios vintage, de tacones muy normales (sí, cero plataformas).

Y aunque algunos lo tomen de forma más minimalista (que también los hay) para mi cuando veo a Valentino esto es lo que espero, atención y precisión al detalle, a lo único, a lo hecho a mano (y toma nota también de las mangas transparentes)

Pero no hay que dejarse engañar, cuando los diseñadores sacaban algo que nos recordaba a Franciso Costa para Calvin Klein, la modelo se da la vuelta y sorprende con una espalda enrejada con pequeños lazos, sello típico de la marca.

Les hablaba de los volados. Y es que es otra huella que ha dejado Valentino al mundo. Blusas, sacos y vestidos con suaves volados que imitan la silueta curvilínea de la mujer, suavizando así al alma más rígida.

Florecillas nada rockeras, una capa medio aglobada, mariposas y acabados que reinvidican el lugar de la Alta Costura en el mundo.

Un pequeño resumen de lo que es Valentino, eso fue esta colección.

Les voy a hablar de este color y sus variantes hasta que:

1. Te aburras y cambies de blog (Dios no quiera).
2. Te compres algo de esto (que me han dicho que en Kids -pantalones que me quedaron hasta los 13 años-, los venden).

Qué FLA-CA la modelo, no??? Volviendo al color, no se si te habrás dado cuenta pero ando obsesionándome con el tema. En zapatos, carteras, faldas y pantalones, te hablo del rojo y sus variante muchísimo, pero no te agobies que aún tengo más por decir. Oh sí.

De rojos que pecan de naranja (y quedan lindos con beige).

De rojos que se combinan con otros rojos (todos siempre con beige -café con leche- beige).

Del “Honeysuckle”, el color que Pantone grita como EL color para el 2011:

De rojos intensos con notas medio cherry:

Que también se casa regio con el café con leche:

De todos los rojos con los que quieras jugar.

Juega con rojo. Todos. Lindos. Y combínalo con beige.

Sí, sabemos que net-a-porter es una de mis páginas favoritas aunque maneja a puros diseñadores top y al menos en mi caso, está totalmente fuera del alcance de mi bolsillo. Pero si hay algo que me encanta y nunca me pierdo son sus revistas, porque siempre tienen mega ideas para aprender y en este caso, para compartir.

En esta última edición, los editores proponen cuatros prendas en las que debes invertir y con las que pasarás regia por la vida de invierno a verano. Yo las planteo al revés, de verano a invierno -por razones más que obvias. Veamos:

• Sandalias de plataforma: Que en otoño -o en este caso, voy a decir Abril-Mayo para Latino-américa-las llevas con pantalones, un top suelto de lentejuelas y tu trench. Ojo, agregar las medias es importante para este look.
• De verano a invierno, llévalas con una falda de jean y una blusa entre pale pink y nude. Bello.

• El vestido de seda, que mejor seamos más realistas y pensemos en un vestido lindo y de una excelente tela, pero no necesariamente de seda. En verano, la consigna es llevar vestidos cortos con flats. El toque chic lo da el collar y ese aire de que esta chica SABE, el bolso rojo (atenta a esto que ya hablaremos más al respecto).
• En invierno, mira qué lindo han jugado con los layers!!! Debajo del vestido un polo con lentejuelas. Por encima, un cardigan tejido (mix&match de texturas señoras, mezcla y combina distintas texturas), medias y botas o sandalias. La carterita cruzada es un detallazo para darle un aire un poco más informal. Lovely.

• Jeans acampanados. 70’s a la vena, y me fascina. Este verano, la propuesta es jugar con la campana del pantalón y contraponerlo con un top halter (que pensándolo bien, no tengo ni uno!). Toma nota otra vez, que la cartera es pequeña y que los zapatos tienen tacón grueso. En realidad, este tipo de pantalones se ven muy “graciosos” con tacones aguja -para mi.
• Si estas en invierno, juega con el camel que taaaaaanto está de moda y sobre ponle algo (un chaleco o un cardigan) tejido. Ese bolso se lo saco a mi mami del clóset AHORITA.

• Y termina con el blazer estilo piloto. Azul de preferencia y toda una pieza de inversión, no temas pagar un poco más de la cuenta por ella si es que eso te asegura calidad y un corte perfecto. En invierno, juega con el estilo punk-rocker, los estampados y las cadenas, y termina con unos pantalones rojos.
• En verano, usalo como un comodín para neutralizar el juego de combinar dos estampados distintos, como aquí que vemos rayas arriba y animal print por debajo, todo con un mismo color como protagonista.

Espero con este post haberle alegrado el día -y llenado de ideas- a mis lectores que estan en pleno invierno o las que estamos muriendo por los calores del verano. Son ideas sencillas, pero que se que te van a ayudar.

Para esta colección (tan simple que peca de brillante), el diseñador Tomas Meier para la marca Bottega Veneta se inspiró en el viaje por tierra que realiza un hombre para re descubrir esos lugares sobre los que normalmente vuela (porque es empresario millonario pues y normalmente hace todo desde su jet privado, ja!).

Para ello utilizó telas arrugadas por naturaleza, estilismos relajados, lejos de las perfección y más próximos a la realidad: Cuando manejas la ropa se arruga, no? La comodidad se vuelve necesaria.

Con una propuesta que bordea lo súper casual con lo mega formal, el diseñador planteó looks monocrimáticos con una paleta de grises, azules y morados, pero donde el verde y el marrón, oh sí, se robaron mi corazón.

Zapatos duros de matar.

Zapatillas todo terreno (de la ciudad al desierto).

Bermudas y polos en un look increíble!!! Dime tu si esto no es diferente a cualquier polo y bermuda que hayas combinado antes???

Y amé las sandalias, creo que toooodo hombre en verano debe tener unas de estas, que son de las que arman el look, te visten, elevan el estilo y gritan personalidad a miles de kilómetros.

Otra parte importante fueron los chalecos, esos multiusos llenos de bolsillos, como para sobrevivir sin que nada te falte.

Pero también están los maletines. Porque dime tu, ¿dónde guardas todas tus cosas? Desde papeles, tu ipod, ipad o laptop, hasta tu ropa para el gym o la oficina. Hombre usa maletín.

Y cierra con un relajado negro que va de pies a cabeza.

Ya sabes qué combinaciones armar este fin de semana, ahora, disfruta tu clóset y mezcla tu ropa!