6 de Noviembre del 2013
Estragos de la Marternidad
No, esa no es mi cara de loca aunque sí, esa es mi cara de loca…pasa pues que a un año de haber tenido una hermosa gordita y rosada y radiante y feliz y sana bebé, toooodo, pero TODO el pelo que se me cayó durante el embarazo y el año de lactancia está creciendo otra vez.
Me lo dijeron, aunque fue un TE LO DIGO que más sonó a la amenaza de una madre que ya pasó y sufrió por eso, y que en un acto caritativo quiere proteger a otro miembro de su especie de vivir lo mismo, aunque sabe que es inevitable pero es parte de nuestro instinto de supervivencia y si alguien tiene instinto de supervivencia esa es una madre. Proteger es instintivo. No le tomé importancia pero madre mía, ando como cuando chiquilla con un frizz de pelillos cortos y espantosos que mira, si quiero, hasta flequillos me podría hacer, trencitas rastas o ponerles lacitos.
Y creo que son peor que mis canas, que las tengo y muchas, son de familia así que vivo en paz con ellas y con el tinte desde hace muchos años pero, estos pequeñines están por toda mi cabeza, por abajo, por arriba, al centro, afuera y adentro. MAY.
El peinado se me hace pues más esponjoso e incontrolable que nunca, ahora debo vivir de la mano de mi buena amiga La Laca para tratar de verme decente, y de productos para el frizz, para controlar el volumen y sobre todo, ando con mascarillas para la hidratación cosa que no muero en el intento ni mato mi voluptuosa -oh só, mira qué voluptuosa que anda ahora mi cabellera.
¿Viste?
Es como el dicho: Todo vuelve. Todos vuelven. Y el pelo post maternidad, también, aunque este no me simpatiza.