El Perú está de moda y ésta no es necesariamente una frase cliché, es una realidad o mejor dicho, una realidad fashion. Somos un país multifacético y el peruano un artífice de sus propias metas, de sus propios éxitos. Es así como al querer recapitular nuestra corta pero valiosa trayectoria en el mundo de la moda, empezar por el comienzo –valga la redundancia- es, definitivamente una tarea nada sencilla.

Por necesidad, el peruano es trabajador, por cultura, somos una gran fuente de inspiración y por naturaleza, estamos llenos de recursos. Somos una necesidad para el mundo. ¿Lo sabías?

Las principales empresas textileras peruanas proveen desde el Perú servicios tan básicos como la confección y bordados de prendas hasta los más complejos, como el diseño y desarrollo de colecciones, pasando por pruebas de color, estampados, bosquejos, muestras, evaluaciones, comparaciones de productos, benchmarking, etc. hasta que el producto finalmente se envía. Y esto, es solo una parte de nuestro aporte a esta industria.

Recientemente fuimos maravillosamente representados en el Mercedes Benz Fashion Week Madrid por: Jessica Butrich, Sitka Semsch y Meche Correa (mira el post acá). También estuvimos en la Semana de la Moda de Canadá con Noe Bernacelli a la cabeza mientras que Andrea Llosa y Sergio Dávila hace tiempo que hacen los suyo por tierras lejanas.

Somos una fuente de inspiración para propios y extraños. Es así que cada vez que un diseñador como Alexander McQueen, Roberto Cavalli o John Galliano visitan nuestro país, sus colecciones se ven inmediatamente influenciados por nuestra cultura.

Por un lado, McQueen se apoderó del poncho y sus variaciones mostrándolo en su pasarela de Invierno 2005. Ese mismo año, la casa Dior de la mano de John Galliano mostraba una Alta Costura tan influenciada por la era Eduardiana y el viejo Hollywood como por la sierra peruana y pinturas de la Escuela Cuzqueña, como si mucho fuera a veces demasiado. Y esta no fue la primera vez. Ya en el 2002 Galliano utilizó chullos complementándolos con inmensos “mohawks”, vistió a sus modelos con tejidos étnicos y utilizó colores y estampados andinos.

Puno fue la inspiración de la diseñadora norteamericana Nicole Miller en el 2007, quien no dudó en ponerle a sus modelos los sombreros típicos de esta región y utilizar también sus diseños y estampados. Ricardo Tisci para Givenchy, puso en marcha una colección sobria y elegante tomando los colores marrones de la sierra peruana y algunos estampados para su colección de Alta Costura 2008 y Roberto Cavalli incorporó bordados en brillantes colores a elegantes abrigos y polleras negras, que combinó con chompas tejidas y complementó con lentejuelas y brillos para un look más nocturno.

Vamos mostrándole al mundo quiénes somos, un Perú que no sólo une a todas las razas, sino que es maravillosamente multifacético y que tiene para ofrecer de todo en todo sentido.

Y llegó el momento de hacer más. Inspirar ya no es suficiente. Confeccionar para marcas extranjeras se nos queda en el tintero. Es momento de sacar pecho por nuestra historia y marcar territorio de acá, hacia delante.

El tejido tiene más de 3000 años en nuestra historia donde la paciencia, conocimiento y habilidad de nuestros tejedores dan por resultado un tejido conocido por su finura y gran calidad.

Quería compartir con ustedes un estudio que me envió el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur) donde se muestran las tres razones principales por las cuales el arte textil adquirió tal importancia en Perú adquiriendo el grado de excelencia:

1. El rudo clima de las montañas requiere vestidos realmente abrigadores.
2. El pueblo peruano era el único pueblo pre colombino que tenía acceso a la lana de los camélidos americanos (llama, alpaca, vicuña) Además ellos cosechaban algodón en la costa.
3. En el contexto de la cultura andina (altamente desarrollada y centralizada), había mucho tiempo libre entre las actividades de la siembra y la cosecha y ese era el tiempo que podían dedicar a las artes. En el imperio Inca, de manera especial, las mujeres escogidas podían dedicar sus vidas enteras al arte del tejido.

Somos un país que ha desarrollado todas las técnicas artesanales conocidas. De los mantos de Paracas a los bordados de Huancavelica. Lo tenemos todo y ahora el mundo entero lo quiere.

Me encanta esta campaña y me encanta ser parte de ella. Somos Perú.