Es que no puedo empezar a contarles la PÉSIMA experiencia que tuve hoy en Ripley.
Resulta que ya, hace un mes o más abrí mi cuenta en Novios Ripley principalmente, porque me enamoré de una vajilla medio inglesa medio holandesa que quería tener. Ni bien la abrí, una de las hermanas de mi mami corrió rápida y audaz a comprar la vajilla para mi.
Pues bien, si bien aún me caso en 11 días, no quería que la vajilla se venda y que cuando vaya por ella ya no esté, y es que abrí ese tipo de cuentas en las que no te envían los regalos si no que te los guardan para que luego los recojas, y siendo esa vajilla una prioridad, hoy quise tenerla.
Fui a Ripley del Jockey Plaza a las 11am, para no soplarme todo el tumulto que suelen haber los días feriados, hablé con la señorita de novios y me dijo que no, no había ningún problema, que busque mi vajilla y que vaya con mi tarjeta de Novios Ripley, que funciona como una tarjeta de débito, y que con los puntos acumulados la podía comprar.
Con mi lista de regalos en mano, fui a la vajilla para verificar cada uno de los códigos (porque es de esas que venden a “granel”, o sea, el plato separado del platito, separado del bowl que está separado de la tacita. Estaba todo el juego completo menos la mantequillera, así que me acerqué a una de las chicas para que me ayude.
La señorita resultó ser un cero a la izquierda. No pueden pedir la mantequillera no sé….a Ripley San Isidro??? Uyyyy, no, IM-PO-SI-BLE, verá, el piso de Hogar está nuevo, no tenemos los códigos ingresados, pedir algo que no sabemos qué es a otra tienda sería humanamente complicadísimo, casi casi imposible.
Ya, no hay rollo, yo misma voy a otra tienda Ripley y la saco. Ya, ahora, me han dicho que me acerque a su Caja (o cualquiera en realidad) y que la compre. Ay no señorita, así no es. Pase usted por acá.
Me llevó a otra caja, con otro señor que puso cara de terror cuando la chica le dijo, ayúdela. Me miró. Lo miré. Le expliqué que quería llevarme mi vajilla, y ahí comenzó todo. El señor iba y venía con el plato, con la cremera, con la espátula (sí, la vajilla viene con una espátula preciosa). Se detenía, ingresaba códigos tras códigos al sistema. Le pedía a la chica que por favor le traiga el juego completo, la chica desaparecía, la chica aparecía, la chica le decía que tenía otras cosas que hacer.
Medio que asada pero nunca tanto le dije al chico que por qué tanto corre corre, que por qué la chica no me quería ayudar. Para todo esto, mi mami se fue la zona de la vajilla para ayudar a que la lleven hasta la caja.
Fue entonces cuando el señor me dijo, y cito textual: Señorita, lo que usted ha pedido es un chambón, por eso NADIE la ha querido ayudar y yo ya estoy metido en esto así que por favor….
Me quedé lela, en una pieza. Primero que nada, que si es un chambón o no, ese no es mi tema, ustedes ofrecen un servicio de novios por lo que no tengo que decirles que, están ustedes para servir. En segundo lugar, es esa la forma de tratar a un cliente??? O sea, mejor dígame que me largue porque como lo que pido resultó ser trabajoso (llevarme una vajilla), usted está atorado conmigo que lo estoy haciendo perder ventas.
Mantuve aún más la calma porque como les contaba en el post anterior, amanecí hecha un ocho y no quería molestarme por cosas que tal vez no eran importantes.
Volví a la zona de la vajilla, donde estaba otra vez la chica con el señor que iban y venían con mis platos, mis tazas, la jarrita, etc….y en eso, a medio metro mío empiezan a discutir que claro, que por este tipo de cosas ellos no ganan comisión, que mira, por atender a la señorita ya me perdí esa venta que fulano me quitó. Sí! Gritó ella, yo también estoy perdiendo mi tiempo acá oye, y ahora? me fregaron la mañana!!!!
Repito, yo estaba a medio metro. Y mi mamá también.
Con todo esto, eran casi la una de la tarde. Y había una señora mayor, cajera, que sabía cómo realizar el trámite -que aparentemente era de lo más complicado que alguien les había pedido- pero que no quería ayudar. O sea, el señor le preguntaba X y ella respondía X. Preguntaba Y y ella respondía Y. En eso le pedí si por favor ella podría encargarse de mi compra porque…como que ya han pasado casi dos horas y quiero terminar??? Pero ninguno ni me miró, ni caso, ni bola, yo no estaba ahí, yo no existía.
Todo terminó 1:15. Más de dos horas para llevarme mi vajilla. Con un personal negado para atención, negado para el servicio y lo que es peor, dejándome bien en claro que mi pedido les había arruinado la mañana a tres de ellos, que lo que pedía era un CHAMBÓN en el que nadie me quería ayudar, o sea, que era menos que bienvenida.

Y para completar el post? Tengo que decir en voz alta que nada de esto ocurre en Saga Falabella, que la historia allá, es simplemente OTRA.
Maaaaaaaaaaal trato en Ripley, pésimo!!! Indignada y con ganas de no volver más pero sobre todo, aconsejándoles novias mías que piensen dos veces antes de armar ahí su lista de novios, no pasen el mal rato que pasé yo, por favor.
Actualización:
Y me acaban de llamar de Novios Ripley, a disculparse por la atención de los vendedores y asegurarme que no vuelve a pasar. Con tal de que esto sirva para que cosas buenas empiecen a ocurrir….se aceptan las disculpas.