31 de Octubre de 2011
Día para estar feliz
Salió el sol pero nunca tanto, esta rico, temperatura perfecta. El fin de semana estuvo tranquilo porque hasta el sol de hoy, vivo acontecida por un dolor de espalda y cuello que ni te cuento. Ando con pastillas que me hacen volar y para serte sincera, estar más de una hora en la compu es un martirio por eso me disculpo de antemano si ven que no ando por acá tan seguido como quisiera.
Sé que esta es la forma más clara que tiene mi cuerpo de decirme que necesito volver al gym, K.O, esta semana empiezo como sea, no puedo más con mi alma y la celulitis, dicho sea de paso. El verano está a la vuelta de la esquina y sobrevivir a la navidad -y sus comilonas- sin deporte ni masajes es casi casi imposible. Qué vaina, no? Se espera que nosotras mujeres maravillosas disfrutemos de todas las fiestas y celebraciones de fin de año y el domingo primero de Enero estemos divinas en la playa. Bueno fuera en el resto del mundo que es invierno y pueden enfundarse en abrigos sin tener que sacar el ombligo al aire, pero no, nosotras no.
Supongo que estoy molesta, supongo que el tema no lo tengo superado al 100% y que a veces me acomplejo mucho aún, demasiado, a veces sigo siendo demasiado consciente de mi mima, especialmente cuando a dos meses de casada subo dos kilos que no parecen irse. Y me entra el pánico. Y me sigue doliendo el cuello y la espalda y anoche la garganta se unió al repertorio de males y empecé con calenturas. Me voy a enfermar.
A veces me pregunto si realmente solo vengo a este lugar cuando me siento mal, cuando quiero quejarme de algo , cuando necesito que mis dedos escriban de una forma u otra lo que piensa mi cerebro y lo que siente mi corazón. No soy perfecta. Por demás insegura -a veces-, por demás feliz casi siempre, 100% humana. Pero quisiera no pensar en esto. Luego me volteo y me doy cuenta que cada inicio del verano es lo mismo, lo empiezo con miedos, insegura, hasta que chapo viada y luego nadie me para y el bikini se vuelve mi BFF, o me atrapa una voraz ráfaga de seguridad que me dice que está bien no se perfecta y camino por la playa como la mejor. A veces sí. A veces no.
Creo que es la época, creo que es el simple hecho de que se acerca el fin de año. Y eso nos pone sensibles, no? Mira tu, ocurren mil cosas en el mundo y una que se preocupa por dos kilos. Hay fantasmas en mi cabeza. A estas alturas de mi vida no debería tener los mismos complejos que a los 20’s. Tengo 33!!!
Ok. He hecho una pausa y he leído lo escrito. Casi lo borro, pero no lo voy a hacer. Porque soy mejor que eso, soy una chica grande y si algo he aprendido en esta vida es a priorizar los problemas. Esto no es un problema. Esta soy yo y el mundo tiene verdaderos problemas.
Pero no quiero hablar de problemas y el cuello me está pidiendo pausa. Tamare, estoy hecha un 8. Literalmente. Solo quería disculparme si me sienten medio ausente estos días, y, decirles que celebren lo que celebren, sean felices, abracen a los suyos, apapáchenlos, repartan muchos besos y sonrisas y sean felices de todo corazón. Mañana primero de Noviembre saludemos a todos los que están en el cielo y recemos por ellos, al menos para mi eso es importante. Por lo pronto, feliz Halloween o Canción Criolla, sea lo que sea, feliz, feliz, feliz, feliz……..ufffffff, terminé el post feliz.